jueves, 13 de octubre de 2011

Carta a los oradores

Hoy es un día especial parati. El día en que desapareces de mi vida para siempre. Estarás feliz ¿no? Acabas de dar un gran paso para tú gran capacidad mental. ¿Qué gran capacidad? Lo siento, me estaba onfundiendo con otra persona. Es lo malo de tener tanta inspiración y expresarlo en hojas de papel qe luego pasan a ser palabras que no tienen el mismo sentimiento. Sí, tienes que darte ya por aludido de una vez. Es por ti. No se porque te estoy dedicando esta entrada pudiendo dejar vola mi imaginación, pero en vez de eso creo que será mejor poner esto ''amor''. ¿Te das por aludido ya? ¿Aún no? Pues lo siento ''amor'', pero no puedo eliminar esa gran palabra porque a ti se te empeñe. Te estarás preguntando el porque. Es demasiado sencillo, aunque seguramente tu te compliques la vida como haces con todo ¿no crees? Te lo puedo decir en diferentes idiomas, hasta en griego si quieres que se me da bastante bien. Sabrás que no me mola la falsedad así que cuando acabe esta preciosísima entrada pondré tu nombre para que todos lo sepan. Tranquilo, tu mismo lo sabes. Ya te lo he dicho, pero con palabras diferentes. Con poca inspiración. Eso sí, nadie sabrá quien eres sólo yo y la persona por la cual has hecho que yo escribiera esto. Lo siento, pero no me puedo contener. ¡Qué bajo has caido, chico! No me puedo creer tus primeras palabras al conocerme. Tranquilo, no me importa si lo que has hecho lo planeaste desde el principio o si lo planeaste con él, que es aún mucho peor. Creo que mi imaginació no da para mas siendo tú. No mereces que te alague poniendo una entrada para ti solito. Espero que te vaya todo bien en la vida, querido Martín Castro

No hay comentarios:

Publicar un comentario